El solo se sienta y mira...intenta captar algo, pero solo silencio es lo que encuentra. -Es raro- se dijo a si mismo -Raro no escuchar nada de nada-. La falta de ideas en su cabeza no era un imposible...pero si una situacion poco comun, le atribuia eso a su costumbre de enrollar hasta las lineas de pensamiento mas simples hasta el infinito. Siguio intentando...solo un suave pitido en sus oidos, resabios de la ultima cancion que su reproductor de musica le escupio directo al cerebro, -Raining Blood, de Slayer- se recordo a si mismo, al mismo tiempo que se alegraba de escuchar algo en su cabeza...instantaneamente sentia los tronidos de la bateria y el riff clasico de guitarra...y ya con eso se sintio complacido, le atormentaba la sola idea de quietud mental, los años y sus vueltas le habian proveido de suficiente material para saciar su apetito casi infinito por analizar situaciones. -Dios bendiga el heavy metal- parafraseo, encontraba entretenido comportarse como un creyente y un hereje al mismo tiempo, le divertian los opuestos, pero mas que nada se complacia siendo moralmente incorrecto.
Llovizna, el viento suave pero frio, le recordaba que a veces no es tan emocionante caminar a casa, pero tambien le susurraba al oido que todo es sobre disfrutar las pequeñas cosas.
-Mierda con las subidas y sin plata para el taxi...la vida del pobre-
Se alejo, perdiendose en otra noche urbana, cantando bajito emulando al Iorio, -desnudar el sin razon, que modelo nuestras vidas, parece ser causa perdida...-
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